Todos hemos visto alguna vez, bien en directo bien por televisión, un artista cargado de diferentes instrumentos musicales y que los toca al mismo tiempo usando sus pies, manos, cabeza, boca, piernas y cintura. Es capaz de reproducir casi cualquier tipo de música con más o menos acierto y divierte a quienes lo observan. Es lo que llamamos “el hombre orquesta”. Para poder interpretar una canción, el hombre orquesta debe saber tocar cada uno de esos instrumentos. No es necesario que sea un virtuos...